Durante su Mensaje a la Nación, la presidenta Dina Boluarte presentó avances y proyecciones en materia de cambio climático y sostenibilidad ambiental, entre ellos nuevas estrategias al 2050, ampliación de áreas protegidas, inversiones en comunidades amazónicas y acciones de restauración ecológica. Sin embargo, el discurso también dejó vacíos importantes en temas clave como la lucha contra la tala y minería ilegal, la gestión del agua, el fortalecimiento institucional y el reconocimiento laboral a los guardaparques. A continuación un balance que revisa en detalle los principales anuncios y omisiones.
Logros en gestión ambiental y conservación
La presidenta dijo que ha consolidado el marco normativo y territorial para la gestión ambiental, aprobando instrumentos orientadores cruciales, tales como:
- Estrategias nacionales al 2050: Se han aprobado la Estrategia Nacional de Cambio Climático al 2050 y la Estrategia Nacional de Diversidad Biológica al 2050, junto con la Hoja de Ruta de Economía Circular al 2050, que promueve el uso eficiente de los recursos.
- Nuevas áreas protegidas: Se ha creado la Reserva Nacional «Mar Tropical de Grau» (entre Tumbes y Piura), así como las Áreas de Conservación Regional (ACR) de Bosques Secos Interandinos de Cutervo (Cajamarca), Medio Putumayo-Algodón (Loreto) y la Velo de la Novia (Ucayali). Con estas incorporaciones, el Perú suma 77 Áreas Naturales Protegidas y 35 Áreas de Conservación Regional, ampliando significativamente la cobertura de áreas conservadas.
- Inversión en comunidades y bionegocios: En articulación con comunidades nativas y poblaciones locales, se han ejecutado S/ 32 millones a través de Transferencias Directas Condicionadas. Además, se han destinado S/ 51 millones para planes de negocio en la Amazonía mediante proyectos de inversión y S/ 4.8 millones para Áreas Naturales Protegidas. La promoción de bionegocios ha permitido colocar más de S/ 29 millones en entidades financieras, facilitando 3935 créditos en 9 regiones y logrando la conservación y/o manejo sostenible de más de 10 000 hectáreas de bosques amazónicos.
- Restauración de ecosistemas: Se están restaurando 250 hectáreas de bosques afectados por minería en Madre de Dios, con una inversión de S/ 1.2 millones y la producción de 150 mil plantones de especies forestales. Asimismo, para recuperar más de 2000 hectáreas afectadas por incendios forestales en Ucayali, Amazonas y San Martín, se han dispersado 7.5 millones de «esferas restauradoras» para recuperar la biodiversidad, mejorar la calidad del agua y generar alternativas productivas para más de 5800 familias amazónicas.
Compromisos para el desarrollo sostenible
De acuerdo al discurso presidencial, el Gobierno ha delineado una serie de acciones para fortalecer la gestión ambiental, destacando:
- Infraestructura de gestión de residuos: Se culminará la ejecución de cinco rellenos sanitarios y plantas de valorización en Chiclayo, Chancay, Piura, Ilave y Chachapoyas, con una inversión de S/ 45 millones. Esto beneficiará a más de un millón de habitantes, evitando que 671.4 toneladas diarias de residuos terminen en botaderos.
- Recuperación de áreas degradadas: Se iniciará la ejecución de ocho obras de recuperación de áreas degradadas en Moyobamba, Tambopata, Tumbes, Paita, Nuevo Chimbote, Juliaca, Huánuco y Ferreñafe, beneficiando a más de un millón de personas.
- Programa nacional para la conservación y recuperación de ecosistemas: Se implementará este programa que integrará las acciones del Programa Bosques, interviniendo en 36 ecosistemas de la Amazonía, los Andes y la Costa.
- Impulso a bionegocios sostenibles: Se destinarán S/ 7.2 millones a bionegocios sostenibles en más de 20 Áreas Naturales Protegidas en 19 regiones, beneficiando a más mil familias de cerca de 100 comunidades.
- Monitoreo ambiental: Se implementarán nueve estaciones de monitoreo y vigilancia de la calidad del agua en zonas clave de Apurímac y Cusco, y cinco estaciones de monitoreo de calidad del aire en Pasco, con una inversión superior a los S/ 21 millones.
- Gran plan amazónico: El Gobierno impulsará el Gran Plan Amazónico, un esfuerzo coordinado para restaurar no menos de 2.5 millones de hectáreas de bosques afectadas por la tala ilegal, la minería ilegal y el narcotráfico, poniendo en valor esta región históricamente olvidada.
La presidenta reafirmó el compromiso de su gestión con una acción climática inclusiva, que prioriza la Amazonía y trabaja de la mano con las comunidades locales para el aprovechamiento sostenible de los ecosistemas.
Ausencias notorias en el discurso ambiental
A pesar de los logros y planes presentados, el mensaje presidencial no abordó algunos temas clave y altamente esperados en materia ambiental y de conservación de la naturaleza:
- Nueva escala salarial para guardaparques: No hubo mención alguna sobre el avance o la aprobación de una nueva escala salarial para los guardaparques, quienes son esenciales para la protección y gestión de las Áreas Naturales Protegidas del país.
- Lucha directa contra la minería y tala ilegal: Si bien se habló de restauración de zonas afectadas, el discurso no detalló estrategias o acciones contundentes y permanentes para combatir la minería ilegal y la tala ilegal en curso, más allá de la recuperación de áreas ya degradadas.
- Gestión integral de recursos hídricos y escasez: Aunque se mencionaron estaciones de monitoreo de calidad del agua, el mensaje no profundizó en una estrategia integral para la gestión del agua frente a la creciente escasez hídrica, el retroceso glaciar y la variabilidad climática, especialmente en regiones andinas y costeras.
- Fortalecimiento institucional y lucha contra la impunidad ambiental: Se omitió una referencia explícita al fortalecimiento de las instituciones clave de fiscalización y sanción ambiental (como el OEFA) y a las medidas para combatir la impunidad de los delitos ambientales, que a menudo están vinculados a redes de crimen organizado.
- Conservación marina y pesca sostenible: A pesar de la reciente creación de una importante reserva marina, el discurso no incluyó una visión más amplia sobre la conservación de los ecosistemas marinos y costeros en general, ni sobre estrategias específicas para la sostenibilidad pesquera o la lucha contra la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada (INDNR).
