El IV Congreso Nacional de Guardaparques del Perú concluyó con un anuncio trascendental que marcó la pauta para el futuro de la conservación en el país: la inminente implementación de la nueva escala remunerativa para el cuerpo de guardaparques. La clausura del evento sirvió como plataforma para el reconocimiento del esfuerzo de estos «guardianes de la nación» en la primera línea de defensa de la biodiversidad.
Más de 200 guardaparques, provenientes de distintas áreas protegidas y de regiones, se reunieron durante tres días en un encuentro que el presidente de la asociación, Hugo Ararima Ruiz, calificó como una «mezcla de sangre y conocimiento».
Un capital humano indispensable
Hugo Arirama Ruiz, presidente de la Asociación de Guardaparques del Perú, abrió la ceremonia subrayando el rol fundamental de sus compañeros en la gestión de las Áreas Naturales Protegidas (ANP).
«Sin guardaparques no hay áreas naturales protegidas. Los guardaparques siempre son el capital humanode las áreas naturales protegidas,» enfatizó Ararima, recordando que, a pesar de haber pasado desapercibidos en muchas ocasiones, su labor es esencial para el desarrollo del país.

El congreso, que se realiza después de 13 años, permitió a los asistentes compartir experiencias y renovar su compromiso, instando a las autoridades a seguir contribuyendo para que el cuerpo logre sus «sueños y objetivos».
El guardaparque: Vigilante, bombero y profesional
José Carlos Nieto Navarrete, presidente ejecutivo del Sernanp, expresó su satisfacción por haber concretado la realización del congreso después de más de una década. Afirmó que este encuentro permitió reflexionar sobre los retos actuales de la conservación, especialmente frente a las actividades ilegales como la minería, los cultivos ilícitos, la tala y la caza furtiva.
Nieto Navarrete elogió el perfil multifacético del guardaparque:
«El trabajo del guardaparques es encomiable, es inconmensurable: es bombero, es vigilante, es un extensionista, es un profesional a carta cabal de la conservación», destacó.
Además, el titular del Sernanp se comprometió con la implementación de la Ley del Guardaparque, y resaltó el trabajo armónico que la institución realiza con las comunidades locales, a quienes considera aliados fundamentales en la defensa del patrimonio natural. Al cerrar su intervención, el presidente ejecutivo preguntó a la audiencia: «¿Quiénes somos?», a lo que respondieron con un entusiasta grito: «Guardaparques del Perú».

Anuncio histórico: Justicia salarial en camino
El punto culminante de la clausura fue el discurso del Ministro del Ambiente, Miguel Espichan, quien no solo reafirmó el respaldo del Gobierno de Transición, sino que también hizo el anuncio más esperado. El Ministro recordó que el compromiso con el guardaparque es una política que trasciende gestiones.
Espichan destacó la importancia de la labor de vigilancia y patrullaje que el cuerpo realiza sobre las 22 millones de hectáreas protegidas, que representan el 18% del territorio nacional.
«Su labor silenciosa, poderosa representa el compromiso más genuino con la naturaleza… Ustedes son nuestra primera línea de defensa ante esas amenazas,» subrayó.
El Ministro culminó su intervención con el anuncio que materializa el reconocimiento a ese esfuerzo:
«Hoy tengo la satisfacción de anunciarles un avance trascendental. Gracias a las gestiones conjuntas con el Ministerio de Economía y Finanzas, desde el día de ayer ya contamos con las partidas presupuestalesque van a permitir hacer realidad la implementación de la nueva escala remunerativa del cuerpo de guardaparques del Perú.»
Esta noticia abre una nueva etapa de fortalecimiento institucional, garantizando mayor estabilidad laboral y una remuneración justa, honrando la vocación, valentía y amor por el Perú de quienes tienen la misión de cuidar la vida, los paisajes y las especies de las Áreas Naturales Protegidas.


