En 2011, la comunidad nativa Yamino, del pueblo indígena kakataibo, ubicada en la zona de amortiguamiento del Parque Nacional Cordillera Azul, recibió una multa superior a los 11 mil soles por incumplimientos en el manejo de sus recursos forestales. El hecho marcó un punto de quiebre en su gestión del territorio, hasta entonces influenciada por acuerdos con terceros y falta de conocimiento técnico.
Lejos de paralizarse, la comunidad asumió la sanción como una oportunidad de aprendizaje. Con el acompañamiento del Organismo de Supervisión de los Recursos Forestales y de Fauna Silvestre (Osinfor), inició un proceso de fortalecimiento de capacidades para implementar un manejo forestal sostenible y comunitario, articulando conocimientos ancestrales con herramientas de planificación como el Plan de Vida.
Reconocimiento oficial y sostenibilidad
Más de una década después, la comunidad ha obtenido tres constancias de cumplimiento de obligaciones emitidas por el Osinfor, en los años 2021, 2023 y 2024. Estas evaluaciones, con una calificación “muy buena”, certifican que Yamino gestiona de forma responsable el área forestal bajo su supervisión.
Melvin Estrella Bardales, dirigente comunal, destacó la participación colectiva en el proceso de mejora. “Nos sumamos todos: jóvenes, mujeres y niños. Fue una etapa muy dura, pero estoy muy agradecido porque nos permitió ordenarnos, no solo como comunidad, sino también junto a la empresa”, afirmó.

Diversificación productiva y turismo vivencial
Además del manejo forestal, Yamino ha desarrollado otras actividades productivas orientadas a la sostenibilidad. Entre ellas destacan el turismo vivencial y de naturaleza, la producción de cacao, la elaboración de artesanías y la agricultura tradicional. Estas iniciativas permiten a la comunidad generar ingresos y, al mismo tiempo, conservar su identidad cultural.
La protección del territorio es otra de sus prioridades. Para ello, han implementado un sistema de vigilancia que incluye patrullajes terrestres y fluviales, así como el uso de drones. Este esfuerzo cuenta con el respaldo de instituciones como Osinfor, AIDER, CIMA y ORAU.
Modelo replicable
Actualmente, la comunidad de Yamino se presenta como un caso representativo de cómo el fortalecimiento organizativo, el acceso a la información técnica y el uso de herramientas de gestión pueden revertir situaciones adversas y consolidar procesos sostenibles.
“Queremos vivir mejor, pero sin dejar de ser quienes somos”, señaló Melvin, al referirse a las aspiraciones futuras del pueblo kakataibo.


