La Institución Educativa de Formación Técnica Japón, ubicada en el distrito de Llata, en la provincia de Huamalíes (Huánuco), enfrenta serias limitaciones en su infraestructura. Sus talleres de formación técnica, esenciales para el aprendizaje práctico de más de 500 estudiantes, han sido observados por el Programa Nacional de Infraestructura Educativa (Pronied) por no contar con espacios adecuados.
“El espacio que tenemos no es el adecuado. Pronied ya ha hecho observaciones y necesitamos con urgencia una nueva construcción”, señaló Carlos Cosme Mauricio, director de la institución. La escuela cuenta con talleres de carpintería, mecánica de producción, electricidad, computación, industria alimentaria, modistería y producción musical.
Aprender haciendo: producción con insumos locales
Los estudiantes desarrollan productos a partir de materias primas de la zona. En el taller de industria alimentaria, por ejemplo, elaboran bebidas y conservas a base de tuna, calabaza y capulí, así como vinos artesanales según la temporada. En carpintería, trabajan con maderas como el pino radiata, el liso y el eucalipto, y en mecánica fabrican piezas metálicas y componentes para máquinas.

“El proceso inicia con una investigación del entorno y la disponibilidad de insumos locales. Luego, diseñan y elaboran los productos”, explicó Cosme. Estas actividades buscan fortalecer las competencias técnicas de los estudiantes y su capacidad para adaptarse al mercado local.
Formación técnica como alternativa de inserción laboral
Uno de los objetivos principales de la institución es brindar a los jóvenes herramientas para emprender o insertarse en el mercado laboral al terminar la secundaria.
“No todos acceden a estudios superiores. Por eso, muchos egresados inician pequeños negocios o brindan servicios técnicos”, indicó el director.
La formación técnica, sostiene Cosme, permite a los estudiantes adquirir habilidades prácticas con aplicación inmediata, lo que representa una ventaja frente a otras escuelas secundarias convencionales.
Pedido a las autoridades
La escuela ha solicitado apoyo al Ministerio de Educación y al Gobierno Regional para la construcción de una nueva infraestructura destinada a los talleres. “Es urgente atender esta necesidad para garantizar una formación adecuada y segura”, remarcó Cosme.

La Institución Educativa Japón es una de las pocas en la región con un enfoque técnico en nivel secundario, lo que la convierte en una opción relevante para estudiantes de Llata y comunidades cercanas que buscan formación con salida laboral.