En un avance trascendental para la memoria histórica y los derechos humanos en Chile, el Gobierno del presidente Gabriel Boric firmó este lunes 7 de julio de 2025 el decreto de expropiación de 117 hectáreas de la antigua Colonia Dignidad, un enclave tristemente célebre por sus vínculos con graves violaciones a los derechos humanos durante la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990). Esta medida busca transformar parte de los terrenos en un Centro de Memoria, un espacio de dignificación para las víctimas y un símbolo de no repetición.
Colonia Dignidad, fundada en 1961 por inmigrantes alemanes bajo el liderazgo del jerarca Paul Schäfer, operó por décadas como una secta hermética que sometió a sus miembros a abusos sistemáticos y que colaboró activamente con la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA) de la dictadura chilena, funcionando como centro clandestino de detención, tortura y desaparición de opositores políticos. A pesar de su cambio de nombre a Villa Baviera en 1991, la sombra de su pasado oscuro ha persistido, generando un reclamo constante por justicia y reparación.

Un gesto de justicia histórica
La expropiación, que se espera concretar durante este mismo año, representa un paso crucial en el compromiso del Estado chileno con la verdad y la reparación de las víctimas. Los ministros chilenos de Vivienda, Francisco Figueroa; Justicia, Jaime Gajardo; y la cartera correspondiente, Carlos Montes, han reafirmado la voluntad política de asegurar que este proceso sea expedito y que se indemnice a los actuales propietarios de Villa Baviera según lo establecido por peritos.
Este hito no sólo marca el inicio de un nuevo capítulo para el sitio y sus víctimas, sino que también envía un potente mensaje a nivel regional sobre la importancia de confrontar los pasados autoritarios y garantizar que la historia sea recordada, especialmente en un continente como el nuestro, donde las cicatrices de la represión aún duelen.
Para Inforegión Perú, la noticia resalta cómo las naciones latinoamericanas continúan sus procesos de justicia transicional, enfrentando las complejidades de su historia para construir un futuro más justo y democrático


