Entender que el ciudadano tiene la obligación y responsabilidad de reciclar no es una tarea fácil; pero el reto es aún más grande cuando no tenemos recicladores formalizados y menos cuando no hay capacidad logística de las municipalidades distritales para atender este problema. Actualmente, se producen más de 21 000 toneladas de residuos sólidos cada día, según el Ministerio del Ambiente (Minam). De esta cifra, solo se recicla el 1,8 %.
“En nuestras manos está escoger botar las cosas a la basura o reciclar. Ese sistema de conciencia no hay en su totalidad. Esa obligación que el ciudadano debe tener de reciclar, no la hay”, afirma Fiorella Danjoy Acosta, directora Regional de la ONG Recicla Latam.
Reciclaje paralelo
Hay dos formas de reciclaje, el primero es el formal que es la recolección de los residuos a través del programa de segregación de las fuentes, el cual se ejecuta a través de las municipalidades. Y el informal que los trabajadores abren las bolsas en las calles y recolectan el material.
“El reciclaje formal te dice que nosotros estamos en un 1.8 %, mientras que el reciclaje informal es una tasa muchísimo más alta, que termina entrando a las clases transformadoras formales, pero en una instancia un poco más lejana”, afirma Danjoy.
Problema de concientización
El problema del reciclaje es principalmente por falta de educación y de cómo reciclar, qué es lo que se debe reciclar. Sin embargo, es un tema transversal, porque el reto radica en formalizar la cadena. Es decir, concientizar al ciudadano, trabajar de la mano con el reciclador y que el gobierno local asuma su responsabilidad.
Para la vocera de Reciclar Latam existe también un problema logístico, y es que hoy no podrían, así quisieran abastecer a todas las casas haciendo la recolección, porque no se tiene ni las estaciones de reciclaje necesarias, ni los recicladores para poder soportar un recojo de toda la población. Entonces, ya se tiene un problema logístico adicional.
Programa Chincha Recicla
Cuando realmente existe el compromiso de la población y el gobierno local, se tienen programas dignos de replicar como el de Chincha Recicla que, desde agosto de 2022 hasta junio de este año, el proyecto organizado junto con la Municipalidad de Chincha, Textil del Valle y Lacoste Foundation, recolectó cerca de 28 000 kilos de residuos en 30 estaciones de reciclaje, divididos en materiales aprovechables de papel y cartón, plástico PET, vidrio y latas.
Además, se concientizó a más de 11 000 hogares y locales e impactó a alrededor de 46 500 personas sobre su rol en la cadena de reciclaje.
“Nosotros los consideramos un proyecto estrella, porque es un caso en el que hemos logrado aumentar las casas de recolección, y esto ha traído como consecuencia que los recicladores se dupliquen en número, ya que pasaron de recolectar en 2000 casas a más de 12000 casas. (…) En el 2022 empezamos, no había tantas casas y hemos ido subiendo, y definitivamente, cuando nosotros salgamos de la zona, que debiera ser en febrero de 2025, el número va a ser bastante mayor que el número que tenemos hoy”, finaliza.
La tarea y el compromiso es de todos los actores sociales, ya que si realmente se quiere contribuir en generar una economía circular donde nada sobre, el cambio comienza por uno mismo.