En un esfuerzo por enfrentar la minería ilegal, 33 comunidades del Alto Nanay realizaron una protesta de 48 horas cerrando el paso en el río Nanay. Estas comunidades, organizadas en el Comité de Lucha del Alto Nanay y la Coordinadora de Comunidades Nativas y Campesinas del Alto Nanay, buscan llamar la atención sobre el avance de esta actividad ilícita.
Pablo Puertas, vicepresidente de la Coordinadora, destacó la gravedad de la situación: “La minería está dentro del área de la conservación, los colombianos ya son dueños de esa zona. A los mismos pobladores no les quieren dejar pasar”. La protesta responde a la inacción de las autoridades y a la corrupción que, según los manifestantes, permite a las redes criminales operar con impunidad.
El monitoreo de Conservación Amazónica (ACCA) confirmó la presencia de más de 550 dragas en la cuenca del río Nanay entre 2021 y 2024, evidencia del alarmante impacto ambiental. Según la Fiscalía, incluso grupos transnacionales, como disidencias de las FARC, controlan partes del territorio afectado.
Amenazas y riesgos para los defensores ambientales
La protesta también busca visibilizar las amenazas que enfrentan los defensores de derechos humanos y del ambiente en la región. Hasta mayo de 2024, al menos 17 comuneros del Alto Nanay habían denunciado intimidaciones por parte de mineros ilegales, según un reportaje de Epicentro TV.
“Todos los que estamos aquí estamos sufriendo amenazas desde el momento en que emprendemos esta lucha contra la minería ilegal”, afirmó Puertas, quien también figura en el registro de defensores de derechos humanos del Ministerio de Justicia.
Los dirigentes enfatizan que la minería ilegal no solo pone en riesgo la biodiversidad y la calidad del agua del río Nanay, sino también la vida de quienes luchan por protegerlo. Este río abastece de agua a gran parte de la población de Loreto, convirtiendo el problema en una preocupación regional.
Exigen respuestas concretas del Estado
Líderes comunales sostuvieron una reunión con funcionarios del Gobierno Regional de Loreto para buscar soluciones a la problemática. Sin embargo, los resultados fueron insuficientes. “Queríamos tener la presencia del gobernador regional, pero no ha sido posible. Nos han presentado proyectos que todavía están en perfil. Por ahora no hay una solución contundente”, señaló Puertas tras la reunión.
Las comunidades demandan medidas inmediatas como la erradicación de la minería ilegal y la implementación de proyectos productivos que mejoren la calidad de vida en la región. Estas exigencias buscan tanto proteger el territorio como ofrecer alternativas económicas sostenibles para las comunidades afectadas.
“Nosotros como grupo queremos hacer un llamado a la sociedad civil también de acá de la ciudad de Iquitos, porque la lucha no solamente es nuestra, todos tomamos el agua del río Nanay”, concluyó Puertas, instando a la ciudadanía a unirse en defensa del río y el medio ambiente.