El Ministerio del Ambiente (Minam), a través del Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado (Sernanp), inauguró un puesto de vigilancia y control en el sector “Los Tanques”, dentro de la Reserva Nacional Illescas. Este proyecto busca reforzar la seguridad y el monitoreo de la biodiversidad marina costera en esta área natural protegida del norte peruano.
Un compromiso por la conservación
El puesto permitirá enfrentar desafíos como la presencia de embarcaciones cercanas a los puntos de concentración de fauna marina y facilitará la coordinación con autoridades locales, la policía de Puerto Rico y la Dirección de Capitanías de Bayóvar para hacer más efectivas las acciones de control.
Infraestructura estratégica
El jefe del Sernanp, José Carlos Nieto, resaltó que la construcción de esta infraestructura fue posible gracias a la cooperación internacional. “Ello fortalecerá la conservación y promoverá actividades sostenibles que beneficien a la biodiversidad y a las comunidades locales», señaló.
El puesto fue construido en un área de 449 m² con una inversión de más de S/ 1 100 000, financiada por el Programa PAN III con apoyo de la cooperación alemana (KFW). Incluye un centro de interpretación, miradores estratégicos para el monitoreo de especies como pingüinos de Humboldt y lobos marinos, oficinas y áreas de descanso para el personal.
Impacto en turismo y comunidades locales
La Reserva Nacional Illescas, reconocida por sus playas Punta Luna, Punta Tur y Charao, se posiciona como un atractivo turístico con potencial en Piura. La nueva infraestructura no solo fortalece la protección de la biodiversidad, sino también fomenta el turismo sostenible y beneficia directamente a las comunidades locales.
Sobre la Reserva Nacional Illescas
Se ubica en el distrito de Sechura, de la provincia del mismo nombre en el departamento de Piura. La Reserva Nacional Illescas, en Piura, protege el paisaje del desierto costero, siendo clave para captación de agua y carbono, control de dunas y mitigación de erosión. Su biodiversidad incluye hábitats adaptados a condiciones extremas y refugios para especies endémicas amenazadas, especialmente aves. Además, su riqueza marina, continental y belleza escénica la hacen ideal para el turismo ecológico y la pesca artesanal.