El Gobierno peruano oficializó el Reglamento de la Ley 31316, que fija por primera vez criterios técnicos y obligaciones para prevenir y controlar la contaminación lumínica en el país. La norma permitirá la aplicación efectiva de la ley, promulgada en 2021, y empezará a regir plenamente desde noviembre del 2026.
Restricciones para la publicidad y la iluminación
El reglamento dispone que los elementos de publicidad exterior deberán permanecer apagados entre las 12:00 a. m. y las 7:00 a. m. todos los días. Asimismo, prohíbe la instalación de pantallas LED o electrónicas en zonas residenciales y a menos de 500 metros de áreas verdes, playas, ecosistemas frágiles y espacios naturales protegidos.
La regulación alcanza a paneles superiores a 12 m², al alumbrado público y a la iluminación empleada en infraestructura deportiva, industrial y de servicios. Para obtener autorización, los operadores deberán presentar una solicitud formal, una ficha técnica, un seguro de responsabilidad civil y un instrumento financiero que asegure el retiro de los equipos.
Multas y obligaciones municipales
Las sanciones por incumplimiento van desde 102 UIT por operar sin autorización hasta 234 UIT por exceder los límites de luminancia. El reglamento también precisa que cualquier persona podrá denunciar infracciones ante el Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA).

Las municipalidades, por su parte, deberán elaborar en un plazo de un año un diagnóstico y un plan de acción orientado a prevenir y controlar la contaminación lumínica. Estos instrumentos deberán incorporarse en la planificación urbana y ambiental e incluir acciones de sensibilización.
Lineamientos técnicos y próximos pasos
El Ministerio del Ambiente (Minam) anunció que elaborará el Protocolo de Monitoreo de Luminancia y los Límites Máximos Permisibles para la publicidad exterior, que serán aprobados en un plazo de 180 días hábiles. Según el sector, la normativa busca promover el uso responsable de la iluminación artificial y contribuir al ahorro energético, la seguridad vial y la protección del cielo nocturno.
Contexto y efectos ambientales
La ley de prevención de la contaminación lumínica fue aprobada en 2021 con el fin de reducir los impactos de la iluminación artificial en la salud humana y en la vida silvestre. Entre los efectos señalados se incluyen trastornos del sueño, enfermedades cardíacas y algunos tipos de cáncer, así como la desorientación de aves migratorias y afectaciones a tortugas marinas e insectos.
Con el nuevo reglamento, el país buscar establecer un marco integral para regular el uso de luz artificial, enfocado en reducir impactos ambientales y mejorar la calidad de vida en entornos urbanos y naturales.


