PASCO. En un esfuerzo conjunto para rehabilitar áreas afectadas por cultivos ilícitos y la tala ilegal, el presidente Ejecutivo de la Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas (Devida), Carlos Figueroa Henostroza, y la alcaldesa de la Municipalidad Distrital de Puerto Bermúdez, Dina Jumanga Mishari, dieron inicio a un proyecto de reforestación que abarcará 1633.5 hectáreas en la región Pasco.
El evento de lanzamiento contó con la participación de la embajadora de Alemania, Sabine Bloch; la ministra de Cultura, Leslie Carol Urteaga; el director ejecutivo del Servicio Nacional Forestal y Fauna Silvestre (Serfor), Luis Gonzales Zúñiga; y el presidente de la Asociación de Nacionalidades Asháninkas del Valle del Pichis (ANAP), Abner Campos.
Inversión de la iniciativa
La iniciativa cuenta con una inversión inicial de S/1 852 486, transferidos por Devida al gobierno local. Durante el primer año de ejecución, se proyecta la siembra de más de 640 000 plantones forestales y agrícolas producidos a través de 30 viveros volantes. Estos viveros generarán 320 866 plantones de shiringa, 224 616 de achiote y 96 250 de cacao. El monto total del proyecto supera los S/4.2 millones y se ejecutará durante un periodo de tres años.
Estas áreas, previamente utilizadas para la siembra de cultivos ilícitos, sufrieron una degradación significativa del suelo y una pérdida alarmante de biodiversidad. El propósito central de este proyecto es el adecuado aprovechamiento de especies forestales de rápido crecimiento con potencial productivo y de mercado, con el fin de mitigar el daño ambiental y restaurar el equilibrio ecológico en 21 comunidades asháninkas de la zona.
“Entre todos tenemos que bloquear el narcotráfico, que es lo que nos hace daño, que es lo que nos trae la deforestación, que es lo que nos trae el cultivo de coca en zonas donde no habían. Simplemente, nos está haciendo perder nuestra potencialidad”, señaló Carlos Figueroa.
Participación de las familias
Con la participación activa de 1089 familias, se brindará asistencia técnica para capacitar en el manejo, conservación y fortalecimiento en la producción y comercialización de especies forestales no maderables de alto valor. Esta colaboración no solo impulsará la restauración ambiental, sino que también generará oportunidades económicas sostenibles para las comunidades locales.
“Tenemos un enfoque muy especial en la lucha contra el cambio climático y en la conservación de la biodiversidad y de los bosques amazónicos. Al mismo tiempo, una parte considerable de los bosques peruanos tiene el potencial para su manejo forestal, como fuente de empleo y de ingreso. Eso mismo representa una estrategia efectiva para comunidades nativas”, señaló la embajadora de Alemania.