UCAYALI. En una conferencia de prensa virtual, representantes de la Organización Regional Aidesep Ucayali (Orau) y su base local, la Federación Nativa de Comunidades Kakataibos (Fenacoka), se reafirmaron en lo expresado en su comunicado inicial sobre la muerte de Benjamín Flores Ríos, reiterando que se trató de un asesinato. El cuerpo sin vida del exagente municipal kakataibo fue hallado en su vivienda, en la comunidad nativa Mariscal Cáceres, ubicada en el distrito y provincia de Padre Abad, región de Ucayali.
Asimismo, ratificaron que Benjamín Flores recibió amenazas verbales de muerte, hace aproximadamente ocho o diez días atrás, por parte de un inquilino cocalero, acusado de sembrar cultivos de coca en territorios de la comunidad. Este individuo había tenido un altercado previo con Flores. Ante estos hechos, volvieron a demandar una investigación exhaustiva del caso para obtener justicia.
Necropsia advirtió hematoma en la cabeza
La abogada Linda Vigo Escalante, del Instituto de Defensa Legal (IDL) de Lima y de la Comisión de Derechos Humanos de Pucallpa, informó que la necropsia, realizada el ayer 19 de diciembre, registró un hematoma en el lado izquierdo de la cabeza del fallecido, quien también presentó hemorragias por la nariz y por la boca.
Sin embargo, el médico legista a cargo le indicó que no es posible determinar la causa de la muerte debido al avanzado estado de descomposición del cuerpo. Por dicho estado, refirió que es probable que su muerte haya ocurrido antes del domingo en la noche o madrugada del lunes, ya que no debió encontrarse en tal grado de deterioro.
«A pesar del estado de descomposición, se pudo advertir el hematoma en la cabeza. La forma y circunstancias de cómo fue encontrado son extrañas. Hay mucho por investigar. Existen muchas dudas y deben ser esclarecidas, porque pudo haber muerto por ser golpeado en la cabeza. Por otro lado, el médico especialista no registró mordeduras de serpiente o animal venenoso en los restos del hermano fallecido«, añadió y detalló que, en la diligencia, estuvieron presentes representantes del Ministerio Público, la Defensoría del Pueblo y el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos (Minjusdh).
Reconocimiento a los pobladores indígenas
Durante su intervención, Herlin Odicio Estrella, presidente de la Fenacoka y vicepresidente de la Orau, destacó que no es necesario que un miembro de la comunidad sea reconocido legalmente como líder o representante, ni que se le identifique como defensor ambiental, término político comúnmente utilizado, para que defienda y proteja su territorio. Hizo esta aclaración en respuesta a comentarios que han intentado minimizar su contribución a la comunidad, al decir que “era un simple comunero”.
Segundo Pino Bolívar, integrante de la guardia indígena kakataibo, recordó su trayectoria. Si bien no ocupaba un puesto de dirección al momento de su muerte, tenía participación activa en los trabajos de demarcación del territorio, proceso clave para la gestión y protección de los recursos naturales y garantizar el ejercicio efecitvo de los derechos sobre el territorio. “Para nosotros, es una leyenda histórica, aunque no haya sido muy conocida su participación en el ámbito político”, expresó.
¿Qué ha sostenido la Fiscalía?
Miguel Ángel Barrionuevo Torres, representante de la Fiscalía Provincial Penal Corporativa de Padre Abad, afirmó el martes por la mañana, en comunicación con este medio, que el cuerpo de Benjamín Flores no presentaba señales de violencia, como heridas de arma de fuego o lesiones visibles. Explicó que, de acuerdo con el procedimiento legal, el poblador indígena fue trasladado a Pucallpa, para que la Fiscalía de turno realice la necropsia y determine la causa de muerte.
Por su parte, el fiscal adjunto Joel Robles, quien estuvo a cargo del levantamiento del cadáver, precisó que la diligencia se realizó a las 11:30 a.m. del lunes 18 de diciembre, con una duración de aproximadamente 45 minutos. Confirmó que el cuerpo fue descubierto en su vivienda, perteneciente al anexo Me Banañu.
«Preliminarmente, no se observaron indicios de asesinato y se descartaron signos de violencia en el cuerpo o que este haya sido golpeado. Se encontró espuma en la boca. Al parecer fue envenenamiento por la picadura de un animal. […] Una persona que se presentó como su hijo, negó que el comunero hubiera recibido amenazas. Pero todo está en materia de investigación«, anotó.
Muerte de Benjamín Flores por esclarecer
Horas después de conocerse la muerte de Benjamín Flores, surgió una versión que rechazaba la información de que había sido asesinado. Washington Bolívar Díaz, quien se presentó ante algunos medios de comunicación como familiar de Benjamín Flores, específicamente como su sobrino, señaló que su fallecimiento se dio por causas naturales y descartó que estuvieran involucrados grupos o mafias de cocaleros.
En ese contexto, denunció que detrás de la narrativa del asesinato estarían organizaciones como Aidesep y Orau, con el objetivo de captar fondos de cooperación internacional, tratando de hacer pasar a Benjamín Flores como defensor ambiental.
Cuestionamientos contra Washington Bolívar
Sin embargo, sobre Washington Bolívar Díaz pesan una serie de cuestionamientos y denuncias. En 2014, Aidesep comunicó que voceros de las comunidades indígenas asociadas a Fenacoka denunciaron a Washington Bolívar por usurpación de funciones y apropiación ilícita en perjuicio del pueblo kakataibo. Según la acusación, el exdirigente realizaba actividades ilícitas a nombre de la comunidad Mariscal Cáceres. Por otro lado, Aidesep manifestó a Inforegión que, en la actualidad, Bolívar Díaz es promotor de la campaña contra los Pueblos Indígenas en Situación de Aislamiento y Contacto Inicial (Piaci).
Además, información publicada por Fenacoka relata que, en febrero de 2018, Herlin Odicio Estrella y Washington Bolívar fueron elegidos presidente y vicepresidente de esta federación, para el periodo 2018-2020. No obstante, en diciembre de ese año, Bolívar inscribió de manera irregular en los Registros Públicos la supuesta renuncia de Odicio, presentando documentos falsos y autoproclamándose presidente.
Como consecuencia de estas acciones, Fenacoka interpuso una denuncia penal contra Bolívar por falsedad genérica, delito por el que anteriormente ya había sido sentenciado. En noviembre de 2019, los socios de Fenacoka decidieron por unanimidad, en una asamblea extraordinaria, separar al exidirigente de la asociación, revocándole cualquier derecho para representar a la federación en instituciones públicas o privadas.
A pesar de esta limitación, el medio digital regional ‘La Voz Ucayalina’ reportó, en mayo de 2023, que Washington Bolívar se hizo pasar como presidente de Fenacoka en una sesión descentralizada de la Comisión de Cambio Climático del Congreso de la República. En aquella publicación, indicó que diversos defensores ambientales lo identificaron como «un emisario disfrazado de la empresa de palma aceitera Grupo Ocho Sur», acusada por comunidades nativas de causar deforestación. En la conferencia de prensa desarrollada este martes, los dirigentes presentes deslindaron, una vez más, de las acciones de Washington Bolívar.
