El 21 de noviembre, en una nueva emisión del programa de la Red de Medios Regionales del Perú, se abordó el complicado panorama de la formalización minera en el país, mediante el Reinfo. Conducido por Alejandra Thais de Inforegión y Jaime Vásquez de La Contra contó con la participación de Máximo Franco Bequer, presidente de la Confederación Nacional de Pequeña Minería y Minería Artesanal (Confemin), y Dante Vera Miller, director de V&C Analistas y miembro del Grupo de Diálogo Minería y Desarrollo Sostenible. Ambos ofrecieron perspectivas sobre el futuro de un sector clave para miles de familias peruanas.
El Reinfo: un sistema colapsado
El Registro Integral de Formalización Minera (Reinfo), creado en diciembre del 2016 para regularizar a pequeños mineros y mineros artesanales, enfrenta un escenario complejo a solo un mes de su vencimiento, programado para el 31 de diciembre de 2024. Desde su vigencia, del total de 87 111 mineros inscritos en el Reinfo, solo 2032 han logrado formalizarse, es decir, el 2.4%.
“La formalización no depende del minero artesanal, sino de los titulares de las concesiones, quienes no quieren firmar los contratos de explotación”, denunció Máximo Franco Bequer sobre esta condición indispensable para la formalización. “Nosotros no pedimos la ampliación del Reinfo, sino la extensión del proceso de formalización”, afirmó.
El presidente de Confemin también destacó que el Reinfo ha sido una herramienta ineficaz para integrar a los pequeños mineros, pues, aunque ofreció incentivos como exenciones penales, no resolvió los problemas estructurales que dificultan la formalización. Insistió en la necesidad de diferenciar entre minería ilegal e informal en el discurso público y alertó que, si no se amplía el proceso, miles de mineros caerán en la ilegalidad, afectando su sustento y el de sus familias
Por su parte, Dante Vera destacó que el fracaso del Reinfo se debe a los requisitos “burocráticos y onerosos” impuestos por el Estado. Según el analista, estas condiciones han perpetuado la informalidad en un país donde más del 75% de la economía opera al margen de la legalidad. “No se puede pedir la ampliación o prórroga del Reinfo si es que no cambiamos las condiciones y los compromisos para garantizar que una eventual transición a la formalización sea efectiva y viable”, añadió.
Ley MAPE: ¿un avance o un retroceso?
El 20 de noviembre, el Ejecutivo presentó al Congreso el proyecto de Ley de la Pequeña Minería y Minería Artesanal o Ley MAPE. Esta iniciativa propone reemplazar al Reifo con herramientas como Zonas Especiales para la pequeña minería y minería artesanal, además del Sistema Interoperable de Pequeña Minería y Minería Artesanal (SIPMA), que centralizaría información y facilitaría la gestión administrativa.
Sin embargo, la propuesta ha generado críticas desde los gremios mineros. Bequer señaló que el proyecto “ignora las demandas urgentes del sector” y calificó como insuficientes las disposiciones planteadas. Por ejemplo, aunque el SIPMA promete transparencia y simplificación de procesos, no aborda el problema central: la falta de contratos de explotación.
Vera destacó el plan de V&C Analistas, que propone incorporar un Plan de Adecuación Ambiental y Legal en la Ley MAPE para lograr una formalización minera justa y eficaz. Este plan se desarrolla en etapas, comenzando con la depuración del Reinfo para eliminar a quienes no están involucrados en la minería, y establece plazos y compromisos claros. Además, prioriza el cuidado del ambiente y la salud de los trabajadores, buscando distinguir entre los mineros artesanales a formalizar y los ilegales a combatir.
V&C Analistas también propone medidas para fortalecer la formalización, como establecer estándares ambientales rigurosos y un sistema de trazabilidad en la cadena de valor del oro. También sugieren derogar la exención de responsabilidad penal, que ha favorecido la ilegalidad, y proteger los derechos adquiridos y concesiones. La propuesta aboga por resolver dificultades contractuales y fomentar un enfoque integral que combine legalidad, tecnología y desarrollo territorial, con el objetivo de avanzar hacia un proceso sostenible y en paz social.
Protestas en todo el país
Desde el 18 de noviembre, miles de pequeños mineros de Confemin han salido a las calles para exigir una ampliación del proceso de formalización y su reformulación. En Lima, las manifestaciones frente al Congreso se mantienen activas, mientras que en regiones como Arequipa e Ica, los cortes de carreteras han generado tensión.
A estas protestas se han sumado los Gobiernos Regionales (GORE) de Ica y Apurímac, que han expresado su apoyo a la ampliación del proceso de formalización minera. En su pronunciamiento, el GORE de Apurímac destacó que es necesario garantizar la continuidad de esta actividad.
En este contexto, queda pendiente el tema de la revisión de los contratos de explotación. Según Vera, algunos concesionarios imponen condiciones inviables, como regalías excesivas, perpetuando la dependencia y el conflicto entre titulares y mineros. Máximo por su parte, recordó que la minería artesanal tiene raíces ancestrales en el país y que muchos mineros han invertido durante años en concesiones que ahora enfrentan incertidumbre.
Un futuro incierto
El viernes 22 de noviembre, el ministro de Energía y Minas, Rómulo Mucho, presentará el proyecto de Ley MAPE ante el Congreso. Mientras tanto, las protestas continúan. La formalización minera en Perú está en una encrucijada. Sin medidas concretas y consensuadas, el sector seguirá atrapado entre la informalidad, la criminalización y un sistema incapaz de adaptarse a su realidad.
