La Cooperativa Agraria Asháninka Kemito Sankori, logró un hito significativo al realizar su primera exportación de cacao orgánico. Concretó la venta de 419 sacos de granos selectos a Italia por un total de 106 000 dólares. Esta organización está ubicada en la cuenca del río Tambo y la conforman 313 socios.
El gerente de la cooperativa, Jhon Cañari Contreras, destacó la importancia de la labor tecnificada y organizada de los agricultores asháninkas. “Los agricultores asháninkas han mejorado notablemente el manejo de sus parcelas. Mediante el apoyo de los especialistas de Asociatividad de Devida, hemos podido acceder por primera vez al mercado extranjero”, indicó.
Este logro destaca el potencial del cacao orgánico peruano en el mercado global. Cabe resaltar que los miembros de la cooperativa pertenecen también a la Central Asháninka de Río Tambo (CART).
El cacao de Kemiko Santori
Los productores de la cooperativa han encontrado en este cultivo una ruta para mejorar su calidad de vida. Hn recibido capacitaciones de la Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas (Devida) para mejorar sus procesos productivos.
A través de cuidadosas fases de cosecha, fermentación y selección, han logrado alcanzar reconocimientos en eventos destacados. Algunos son el Salón de Cacao y Chocolate y el Concurso Nacional de Cacao de Calidad. De esta forma han conseguido precios más favorables para sus productos y una mejora significativamente la vida de sus miembros.
Este compromiso ha permitido a las comunidades nativas de Río Tambo transitar hacia una forma de vida más sostenible. La elección del cultivo del cacao no solo ha mejorado sus ingresos, sino que también ha promovido un enfoque respetuoso con el ambiente, manteniendo así un equilibrio entre la tradición, la calidad y la sostenibilidad en la región.
Apoyo de Devida
Desde 2019, Devida ha brindado asistencia a 687 familias pertenecientes a 25 comunidades nativas de la CART, enfocándose en la asociatividad, gestión comunal y producción sostenible de cacao, café y productos acuícolas. Este programa ha beneficiado a 585 familias cacaoteras que gestionan 510.5 hectáreas de cacao bajo un sistema agroforestal.
