Desde Tingo María hasta el corazón de París. Así ha sido el camino de Kaori, la marca de chocolates de la empresa familiar Qorikao EIRL, que obtuvo una medalla de plata en el V Concurso Internacional de Chocolates Elaborados en el Origen, organizado por la Agencia para la Valorización de los Productos Agrícolas (AVPA) de Francia. El producto galardonado: grageas de cacao cubiertas con chocolate al 60%.
“Ha sido una sorpresa muy gratificante, un orgullo para nosotros como tingaleses”, cuenta Kempia Canales, encargada del área de producción e hija de Marcelina Yaranga, fundadora y gerente general de la empresa. Kaori participó en la ceremonia de premiación el próximo 29 de octubre durante el Salón del Chocolate en París, uno de los eventos más importantes del sector a nivel mundial.
Resiliencia familiar y apuesta por el valor agregado
Qorikao nació oficialmente en 2023, pero su historia se remonta a varios años atrás. “Empezamos en 2019 con otra razón social, y aunque la pandemia nos golpeó fuerte, logramos salir adelante”, recuerda Kempia. Las pérdidas familiares y el freno económico no impidieron que la familia Yaranga mantuviera su apuesta por el cacao de calidad.

La marca Kaori comenzó con barras de chocolate al 60%, productos bitter, con leche y con arándanos. Hoy, han diversificado su oferta e innovan constantemente. “Tenemos chocolates con ají, con piña y otros nuevos productos que vamos a presentar en el Salón del Cacao y Chocolate 2025”, cuenta Kempia.
Cacao del Alto Huallaga, Piura y el Vraem
El insumo principal de Kaori proviene de diversas zonas del Perú. “Trabajamos con cacao de la región Huánuco, especialmente del Alto Huallaga, y también con orígenes de Piura y del Vraem 99”, explica Canales.
Esta diversidad permite a la marca experimentar con sabores y texturas, apuntando tanto al mercado nacional como al internacional. El premio en París representa más que una distinción: es una oportunidad para internacionalizarse. “Este logro nos motiva a seguir creciendo y nos abre un nuevo camino para mostrar que el chocolate de Tingo María puede competir al más alto nivel”, señala con entusiasmo.
Aunque el mercado local aún es un reto, Kaori ha encontrado en el esfuerzo colectivo y la pasión por el cacao una fórmula ganadora. Con la mirada puesta en octubre, la familia Yaranga se prepara para representar al Perú con orgullo en una de las vitrinas más prestigiosas del chocolate mundial.


