La conservación de los bosques se ha convertido en una de las principales líneas de acción del Ministerio del Ambiente (Minam) para enfrentar los impactos del cambio climático. Estas medidas están alineadas con la Estrategia Nacional de Cambio Climático al 2050 y con los objetivos fijados en el Acuerdo de París.
Uno de los ejes centrales de este esfuerzo son los proyectos REDD+ (Reducción de Emisiones por Deforestación y Degradación de bosques), un mecanismo promovido por las Naciones Unidas que busca proteger los bosques, manejarlos de manera sostenible y ampliar la superficie forestal en países en desarrollo.
Participación de comunidades y actores locales
La directora general de Cambio Climático y Desertificación del Minam, Berioska Quispe, resaltó el impacto positivo de estos proyectos.
“En el Perú, estos proyectos se implementan con la participación de comunidades, gobiernos regionales, organizaciones y empresas, generando beneficios ambientales, sociales y económicos”, indicó.
Con esta articulación, los proyectos REDD+ no solo buscan frenar la pérdida de bosques, sino también generar oportunidades de desarrollo local a través de actividades como el manejo forestal responsable, la agroforestería y el ecoturismo.
Beneficios ambientales y sociales
Los bosques cumplen un papel esencial en la lucha contra el cambio climático: absorben y almacenan dióxido de carbono, regulan el clima y garantizan la provisión de agua. En este sentido, los proyectos REDD+ representan una herramienta clave para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y fortalecer la seguridad alimentaria en comunidades amazónicas.
“Así se busca reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, se contribuye a la seguridad alimentaria, se mejoran los ingresos de las familias y se conserva la biodiversidad”, añadió Quispe.
Registro de avances climáticos
Todas estas medidas se registran en el Registro Nacional de Medidas de Mitigación (Renami), una plataforma que permite al Estado reconocer, medir y dar seguimiento a los avances del país en la reducción de emisiones.
“Cuando conservamos un bosque, cuidamos nuestra casa común y también protegemos el agua, la biodiversidad y el clima. REDD+ y el Renami nos permiten reconocer y potenciar estos esfuerzos”, destacó la funcionaria del Minam.
Impacto en comunidades amazónicas
Actualmente, el Perú cuenta con diversos proyectos REDD+ en ejecución que ya han evitado la emisión de millones de toneladas de dióxido de carbono. Estos programas benefician directamente a comunidades indígenas y rurales que habitan en la Amazonía, fortaleciendo sus medios de vida y garantizando la protección de los bosques para las próximas generaciones.
