El Gobierno Territorial Autónomo de la Nación Wampís (GTANW) ha retomado con mayor intensidad las acciones de control contra la minería ilegal en la cuenca del río Santiago, en la región Amazonas. El 12 de julio, informamos cómo autoridades y comuneros realizaron una movilización fluvial con el objetivo de retirar dragas ilegales, en el marco de su jurisdicción indígena, reconocida por la Constitución y tratados internacionales.
La medida se da en respuesta a lo que el GTANW considera una “ausencia del Estado peruano” en la defensa del territorio frente a actividades ilícitas. La organización indígena sostiene que más de 30 dragas operan actualmente en la zona y que las intervenciones oficiales han sido insuficientes.
Operativo en Kanús y negativa de apoyo militar
Durante la jornada, las autoridades Wampís, junto a su equipo técnico y el sistema de control socioambiental “Charip”, recorrieron el bajo río Santiago (Kanús). En el trayecto, identificaron que varios operadores ilegales habían suspendido sus actividades y ocultado sus maquinarias en quebradas afluentes como Yuraik, Napinas y Kupatas.
La comitiva también llegó a la base militar Teniente Pinglo, donde solicitaron apoyo logístico y de seguridad. Según el GTANW, el comandante de la base, Estévez Nicolich, indicó que no podía brindar asistencia porque no contaba con autorización de sus superiores. La organización señaló que esta solicitud había sido planteada previamente en reuniones con el Ministerio de Defensa.
Enfrentamiento en la comunidad de Fortaleza
Al concluir la operación, mientras las embarcaciones del GTANW se desplazaban río arriba, fueron atacadas a la altura de la comunidad de Fortaleza por presuntos mineros ilegales. De acuerdo con el reporte, se utilizaron explosivos y armas de fuego, aunque no se registraron heridos debido a maniobras evasivas de los conductores.
“Cuando las unidades fluviales se acercaron a la comunidad de Fortaleza, los mineros ilegales iniciaron un ataque con explosivos y armas de fuego de largo alcance. Pero gracias a la maniobra evasiva de los conductores, ninguna persona resultó herida”, informó el GTANW.
Reclamos y posicionamiento de la Nación Wampís
Durante su visita a la base militar, el vicepresidente del GTANW, Galois Flores Pizango, afirmó que las acciones del pueblo Wampís no buscan confrontar al Estado, sino ejercer su derecho a proteger el territorio.
“El trabajo que hace la Nación Wampís sobre la defensa del territorio no es extraño para el Estado peruano. Nosotros que hemos servido a la patria de alguna manera, sabemos sobre la defensa del territorio, por lo tanto, es una obligación”, declaró Flores Pizango.
También advirtió sobre los impactos sociales que deja la minería ilegal en la zona, como enfermedades, violencia sexual, abandono familiar y contaminación de ríos. “Observamos con preocupación el incremento de la contaminación del río Santiago, el cuerpo de agua donde tomamos peces para alimentarnos y del cual depende toda nuestra existencia”, agregó.
Demanda contra el Estado y nuevas estrategias
La organización indígena anunció que interpondrá una demanda por la “incapacidad del Estado peruano” para participar activamente en la erradicación de la minería ilegal en sus territorios. En paralelo, el GTANW ha instalado una base de vigilancia comunitaria en San Rafael y mantiene un plan de acción territorial, amparado en sus normas consuetudinarias.
“No es delito defender la soberanía territorial ¡Delito es destruir la naturaleza! La fuente de vida para los Wampís, el Perú y la humanidad”, declararon las autoridades en un pronunciamiento.
El GTANW también denunció que representantes de comunidades afectadas en el bajo Santiago no pueden pronunciarse públicamente debido a amenazas de redes vinculadas a la minería ilegal. La organización reafirmó que sus acciones continuarán bajo el principio de movilización pacífica y en coordinación con su sistema de justicia indígena.
