El 15 de enero de 2022, un derrame de 10704 barriles de crudo se extendió por el mar, cubriendo un área equivalente a 3400 canchas de fútbol. Este desastre tuvo un impacto devastador en el ecosistema marino, causando la muerte de miles de especies y afectando gravemente la pesca artesanal y el turismo en la región. Tres años después, las secuelas de uno de los peores desastres ecológicos en la historia del país siguen siendo motivo de preocupación. Repsol
Recientemente el Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA) ha confirmado que dos de las treinta playas afectadas por el desastre aún superan los límites permitidos de hidrocarburos en sus sedimentos. Se tratan de las playas Pocitos y 18, ubicadas en el distrito de Ancón. Según el OEFA, las actividades recreativas en estas dos playas no son convenientes por el momento.
Monitoreo y análisis de las playas afectadas
El presidente del OEFA, Juan Narciso, informó que hasta la fecha se han tomado más de 15 000 muestras en las playas comprometidas. A pesar de los esfuerzos por mitigar el daño, los valores de hidrocarburos en Pocitos y 18 continúan por encima del umbral establecido para garantizar la seguridad de los bañistas. Narciso señaló que el monitoreo de estos valores es fundamental para determinar la seguridad de las playas y garantizar la salud pública.
«Los resultados de estos monitoreos fueron puestos en conocimiento de las autoridades competentes, como Digesa y los gobiernos locales, para que evalúen la situación y determinen el uso correspondiente de las playas», comentó el presidente del OEFA. Las autoridades deberán seguir tomando las decisiones necesarias sobre la viabilidad de estas zonas para el disfrute de los ciudadanos.
Compromisos incumplidos y medidas de rehabilitación
Como parte de sus responsabilidades, Repsol está obligada a presentar planes de rehabilitación para las zonas afectadas. Según el presidente del OEFA, la empresa presentó 18 documentos relacionados con estos planes, pero su aprobación depende del Ministerio de Energía y Minas (Minem), proceso que aún no se ha concretado.
Sin embargo, un informe elaborado por CooperAcción, con el apoyo de Oxfam, señala que hasta la fecha el Minem ha rechazado la totalidad de los 18 planes presentados por Repsol. Las deficiencias incluyen omisiones críticas en el análisis de ecosistemas y la ausencia de información detallada sobre la fauna y flora afectadas.
Según el Serfor «los planes no describen adecuadamente las zonas de anidación, reproducción ni refugios de las especies afectadas, lo que impide formular acciones efectivas de recuperación». El informe también destaca que los análisis ecotoxicológicos son insuficientes y que las medidas propuestas se centran en el monitoreo a corto plazo, ignorando las necesidades de restauración a largo plazo.
Sanciones económicas a la empresa Repsol
En cuanto a las sanciones impuestas, hasta el momento se han concluido 13 procedimientos administrativos sancionadores (PAS) contra la empresa, de los cuales cinco han resultado en multas firmes por un total de más de 64 millones de soles (12.616.333 UIT). Estos pagos ya han sido realizados por Repsol. Sin embargo, otras siete sanciones, que suman multas por 70 millones de soles, están actualmente en proceso de impugnación. Uno de los procedimientos fue archivado.
¿Sabías que a tres años del derrame de Repsol, el 60% del petróleo aún no ha sido recuperado? Conoce más sobre este tema en un informe completo aquí.