La minería ilegal de oro en Perú continúa siendo una de las principales preocupaciones económicas y sociales del país. Miguel Cardozo, exdirector del Instituto de Ingenieros de Minas del Perú (IIMP), advirtió que esta actividad ilícita podría generar hasta US $6,000 millones en 2024, exacerbando la crisis ambiental y criminal que enfrenta el país.
Durante una entrevista con Sol TV, Cardozo describió el impacto devastador de la minería ilegal en regiones clave como La Libertad y otras partes del territorio nacional. “Esto es una verdadera barbaridad. La cantidad de oro ilegal que se está extrayendo en el país es enorme, en este momento estamos hablando de US $6,000 millones”, señaló con preocupación.
La minería ilegal no solo afecta las finanzas del país, sino que también contribuye a la destrucción de ecosistemas, el desplazamiento de comunidades y el fortalecimiento de redes criminales que operan sin impedimentos en diversas zonas de Perú.
Falta de acción por parte del Estado
Una de las críticas más severas de Cardozo fue hacia la inacción del gobierno frente a esta problemática. Señaló que el Estado peruano, en general, ejerce su autoridad frente a la minería formal, siendo rigurosos con trámites que demoran y resultan ineficientes, pero “cuando ve casos como el de la minería ilegal, no interviene”, lamentó. Esta falta de intervención ha permitido que las mafias y organizaciones criminales se consoliden, incrementando su control sobre las actividades mineras ilegales.
El exdirector del IIMP no dudó en señalar que la minería ilegal está amparada por redes de corrupción que permiten que el mineral extraído ilícitamente sea transportado, procesado y exportado sin mayores trabas. “Aquí hay redes de corrupción. Hay mafias que están tomando el control de toda esta actividad ilegal”, afirmó. Esta impunidad favorece la expansión de estas organizaciones criminales, las cuales operan con total libertad en diversas regiones del país.
Cardozo también subrayó la importancia de las elecciones presidenciales del próximo año como una oportunidad para cambiar el rumbo y enfrentar con seriedad este problema. “La minería necesita ser respaldada y defendida, y todas las actividades económicas honradas tienen que seguir ese mismo camino”, recalcó. Según el exdirector, es crucial que los ciudadanos elijan autoridades competentes que puedan poner fin a la inacción y fortalecer el control estatal sobre la minería ilegal.
Un llamado a la diligencia
Finalmente, el experto lanzó un llamado de atención a la ciudadanía: “Pongamos cuidado en qué hacemos estos próximos años para elegir al futuro gobierno. Esto es muy importante y no podemos descuidarnos porque nuestro país terminaría siendo un desastre y un desorden incontrolable”.
La minería ilegal sigue siendo uno de los principales desafíos para el desarrollo sostenible y la estabilidad económica de Perú, y la urgencia de tomar medidas concretas es cada vez mayor. Las próximas elecciones presidenciales, según Cardozo, podrían marcar un antes y un después en la lucha contra esta problemática.