Las regiones andinas y amazónicas del país están experimentando un aumento preocupante en la frecuencia de incendios forestales. Las condiciones climáticas actuales, caracterizadas por temperaturas elevadas y falta de lluvias, intensifican el riesgo en áreas como Apurímac, Huancavelica, Ayacucho y Puno.
Estas regiones, que albergan una rica biodiversidad, están viendo cómo el fuego amenaza tanto sus ecosistemas como las comunidades que dependen de ellos. Además, otras áreas como Cajamarca, Áncash, La Libertad, Cusco, Junín y Lima comparten factores de riesgo similares, colocándolas en una situación de alerta crítica.
En lo que va del 2024, se registraron 2164 incendios forestales en diversas regiones del país. Áncash (238), Huánuco (223), Ucayali (208), Cajamarca (205), Cusco (156) y Puno (154) figuran entre las más afectadas. Estas cifras son alarmantes si se comparan con los casi 7000 incendios reportados en 2023, evidenciando una tendencia ascendente que requiere atención urgente.
La información fue proporcionada por el reporte Condiciones Favorables para la Ocurrencia de Incendios (CFOI), de agosto de 2024, elaborado por la Dirección General de Ordenamiento Territorial y de la Gestión Integrada de los Recursos Naturales del Ministerio del Ambiente (Minam).
Impacto en las comunidades y ecosistemas locales
El impacto de estos incendios va más allá de la destrucción inmediata del paisaje. Las comunidades locales, las cuales dependen de la agricultura y la ganadería, están viendo cómo sus medios de vida se ven gravemente afectados. La pérdida de bosques y áreas de cultivo provoca un daño económico, que amenaza la seguridad alimentaria y el equilibrio ecológico.
Los incendios forestales también están teniendo un efecto devastador en la fauna local, con numerosas especies en peligro de extinción que ven su hábitat destruido. La falta de recursos para la prevención y control de estos incendios agrava la situación, dejando a muchas de estas regiones en una situación de vulnerabilidad extrema.
Esfuerzos para combatir los incendios
A nivel nacional, se han comenzado a articular esfuerzos para apoyar a las regiones más afectadas. El Minam señaló que colabora con los gobiernos regionales y municipales para mejorar las capacidades de respuesta ante incendios forestales. A la fecha se capacitaron a 300 especialistas.
Aunque se han logrado avances en la capacitación de equipos locales y en la elaboración de planes de contingencia, se reconoce que la situación sigue siendo crítica y que se requiere una acción continua y coordinada.