HUÁNUCO. Hace 35 años, los padres de familia del centro poblado de Manchuria, ubicado en el valle del Monzón, construyeron con sus propias manos la Institución Educativa Integrado 32457. Con materiales rústicos de la zona, incluyendo vigas y columnas de madera, paredes de machimbre, ventanas de fierros y un techo de calamina con cielo raso de cartón. La escuela brinda educación a los niños.
Sin embargo, tras más de tres décadas de uso, las aulas de esta institución muestran el deterioro por el pasar de los años. Paredes a punto de caer, goteros en el techo y madera podrida son el panorama que observan todos los días los docentes y los alumnos. Este alarmante deterioro pone en riesgo a los escolares ante un posible colapso.
“La parte física está completamente dañada. Hay una preocupación por nuestros padres de familia con las autoridades del pueblo para poder subsanar esto. Hemos tenido una reunión de emergencia con los padres, donde indicaron que pueden construir otro. Pero, no podemos afectar la economía de las familias”, dijo Elmo Ariza, director de la escuela.
Estudiantes afectados
Este peligro constante afecta a los más de 90 alumnos de primaria y secundaria que asisten diariamente a clases en la institución. Además, no solo la infraestructura del colegio muestra el desgaste de los años, sino también el mobiliario, como pupitres y sillas.
«Necesitamos que las autoridades nos escuchen y actúen. Nuestros hijos merecen estudiar en un lugar digno que les brinde las condiciones necesarias para un buen aprendizaje y desarrollo», expresó un representante de los padres de familia.
Obet Reyes Narciso, docente del colegio, indicó que las aulas del colegio también son bibliotecas, almacén de materiales educativos y de defensa civil. “Es un riesgo. Todos los alumnos están temerosos de que todo esto se venga abajo”, señaló el maestro.
Expediente técnico
La comunidad de Manchuria luchó para asegurar un futuro mejor para sus hijos, alejándolos de las garras del narcotráfico y el terrorismo que asolaron la región durante las décadas de 1980 y hasta el 2011. Si bien el Estado peruano logró pacificar el valle del Monzón, trayendo desarrollo y paz, el tiempo parece haberse detenido para la I.E 32457.
A pesar de contar con un expediente técnico, desde el 2011, para la construcción de una nueva infraestructura básica y moderna, ninguna autoridad del distrito de Monzón, ni de la provincia de Huamalíes, ni del Gobierno Regional de Huánuco, muestra interés en ejecutar el proyecto.
“Nosotros le pedimos a las autoridades provinciales y distritales que tomen en cuenta esta situación y declaren en estado de emergencia estas dos aulas. (…) Tenemos un expediente técnico del 2011, que es viable y tiene un monto presupuestal de S/9 580 760. Tiene un expediente al 100 %, no sé a qué se debe que no se lleve su ejecución”, dijo Abraham Roque, alcalde del centro poblado de Manchuria.
Pedido para nuevo colegio
La comunidad educativa de Manchuria, incluidos docentes, padres de familia y autoridades locales, hace un llamado urgente al gobierno regional para que se busque financiamiento y se ejecute la construcción de una nueva infraestructura que garantice un ambiente seguro y adecuado para el aprendizaje.
“Estamos olvidados, ya que en otros lugares cuentan con moderna infraestructura. Nuestros alumnos, se ven penosos, que estén estudiando en este tipo de módulos. Pedimos al señor gobernador que tome cartas en el asunto y tome conciencia y envíe a sus representantes para tener una reunión y ver esta situación”, dijo Roque.
La localidad de esta zona de Huánuco espera que su clamor sea escuchado y que, después de tres décadas de espera, se les otorgue la infraestructura educativa que tanto necesitan y merecen.