UCAYALI. Miguel Guimaraes, vicepresidente la Asociación Interétnica de Desarrollo de la Selva Peruana (Aidesep) y líder del pueblo shipibo – konibo, sufrió un atentado. Según se relata, su vivienda fue asaltada y violentada durante la noche del 24 abril. Esto sucedió en el distrito de Yarinacocha en la ciudad de Pucallpa.
Los responsables, aún no identificados, quemaron ventanas, forzaron las puertas y robaron las pertenencias del dirigente indígena. Asimismo, dejaron un mensaje en la pared de su vivienda, donde se puede leer las palabras “No vive”.
Los hechos sucedieron mientras Guimaraes retornaba a Perú, luego de su participación en la Tercera Conferencia de las Partes del Acuerdo de Escazú (COP 3 Escazú) en la ciudad de Santiago de Chile. Evento que se realizó para tratar la situación actual de defensoras y defensores de los derechos humanos en asuntos ambientales.
Como se recuerda, el dirigente denunció en diversos medios de comunicación la complicidad entre las autoridades y la empresa Ocho Sur. En una reciente entrevista, el dirigente señaló que la empresa deforestó más de 7000 hectáreas de bosques primarios para sembrar palma aceitera «a vista y paciencia de las autoridades», afirmó.
Además, Guimaraes ha mostrado su rechazó ante la campaña de difamación y divisionismo contra líderes indígenas, defensores ambientales y representantes de la sociedad civil que denuncian las ilegalidades de empresas agroindustriales en la región de Ucayali.