“El 13% de los distritos amazónicos tienen minería ilegal. El 91% es por la extracción del oro y el 9% tiene que ver con la extracción de minerales no metálicos. De todas estas regiones, la más afectada, históricamente, es Madre de Dios”. Así declaró para Inforegión, Manuel Zapata, vocero legal del Observatorio de Minería Ilegal (OMI).
Sobre esta realidad preocupante es dable reflexionar, hoy en el Día Internacional de la Madre Tierra. Como se recuerda, nuestro planeta tiene en la Amazonía un espacio que destaca por su asombrosa biodiversidad. Sin embargo, en el Perú la minería ilegal impacta negativamente en ella y en la salud de las personas.
En nuestro país, la Amazonía es el principal escenario de esta actividad ilícita. Zapata informó que, en total, 32 distritos peruanos son afectados por este flagelo. Estos están ubicados principalmente en las regiones Loreto, Amazonas, Madre de Dios, San Martín y Huánuco, agregó.
Para seguir la evolución de la minería ilegal, el OMI difunde, periódicamente, boletines en el que da cuenta de sus últimos hallazgos. Los estudios son elaborados en base a la información trabajada por varias instituciones que integran el OMI. “Somos una plataforma que aglutina a organizaciones expertas y a través de ellas tenemos la posibilidad de generar información basada en evidencia (sobre minería ilegal)”, dijo.
Monitoreo de la actividad ilegal
El OMI publicó sus más recientes hallazgos sobre la minería ilegal aurífera en las regiones Madre de Dios y Huánuco. La información está en su boletín RAMI n° 37 con observaciones hechas hasta marzo del 2024. En Madre de Dios los casos más saltantes se hallaron en cuatro espacios dentro y fuera del corredor minero. Los datos son alimentados, además, por alertas que registran el desbosque en la Amazonía peruana.
Se ha identificado una pérdida significativa de cobertura boscosa en el interior de la Comunidad Nativa de San José de Karene. Los registros obtenidos muestran una pérdida de bosque de 6.32 hectáreas. En tanto, en la Comunidad Nativa Arazaire se registró la pérdida de cobertura forestal en 6.54 hectáreas.
Siguiendo en Madre de Dios también, se identificaron casos de deforestación en las Concesiones Forestales al norte de Boca Inambari. Aquí la pérdida de espacio boscoso corresponde a 4.27 hectáreas. Finalmente, la pérdida de bosques en la Zona de Amortiguamiento de la Reserva Nacional Tambopata fue de 7.38 hectáreas.
En cuanto a la región Huánuco, la minería ilegal afectó a espacio boscoso situado en la provincia de Puerto Inca. La mayoría de los casos de deforestación fueron en zonas de concesiones mineras en trámite. Estos se dieron al interior de la zona de amortiguamiento de la Reserva Comunal El Sira.
Hubo una pérdida de 9.19 hectáreas en las concesiones mineras en trámite “Loco Tony”, “Tonder 75” y “Diego Abad Uno”. También se registró una pérdida de bosques (40.34 hectáreas) al interior de las concesiones mineras en trámite “Yo Mismo Soy CYYM”, “Lopez II” y “Lian 20023”. Finalmente se perdieron 19.07 hectáreas, en la concesión minera “Inca Dorado 2”.
Gestión del conocimiento
“El OMI es un espacio de articulación y participación de la sociedad civil. Está conformado por 14 organizaciones y expertos comprometidos con la prevención de la minería ilegal, la mitigación de los impactos con la prevención de la misma también. Las principales tareas que desarrollamos tienen que ver con la promoción de la gestión del conocimiento”, sostuvo Zapata.
Y es en esa labor que difunden la información que elaboran sobre la minería ilegal “para contribuir a la toma de decisiones de agentes gubernamentales, agencias cooperantes y de los mismos miembros del observatorio”, dijo. Zapata añadió que el OMI tiene tres años de creación. “Evidentemente nos hemos fortalecido y nos hemos puesto en mayor alerta también ante el crecimiento de esta actividad ilegal que afecta ecosistemas, personas y la economía del país”, afirmó.
Por otro lado, añadió que alistan un proyecto para registrar el impacto que tiene el uso del mercurio en la salud de las personas. “Estamos trabajando con parte de los socios del OMI un proyecto para hacer toma de muestra de sangre, de cabello, y en ríos del Perú y espacios de frontera”, precisó.