Durante enero, se inició la limpieza de playas de Lima Norte y del Callao, donde, de acuerdo a la ONG Vida, se han recogido más de 50 toneladas de desperdicios. Los residuos hallados cerca del mar eran domésticos, comerciales, industriales y hospitalarios.
La mencionada ONG, encargada de la campaña Playas Sin Basura 2024, denuncia que en el Perú no se cumplen las leyes y reglamentos que regulan la gestión de residuos.
Campaña para limpiar playas
«La campaña inició el 13 de enero, en las playas más contaminadas del Perú y quizás de Latinoamérica. Estas son Márquez en el Callao, Costa Azul en Ventanilla y Pocitas y Rocabeach en Ancón. Al finalizar enero, se recogieron más de 50 toneladas de residuos de todo tipo, donde los residuos hospitalarios e industriales son los de mayor peligro para la salud de los bañistas», dijo Arturo Alfaro, presidente de la ONG Vida.
Según el ecologista, la situación ha mostrado que los residuos sólidos son el principal problema de contaminación en estas playas. Los desechos hospitalarios y de amoniaco fueron encontrados en los 26 kilómetros de litoral, desde Callao hasta Ancón.
Alfaro indicó que esta realidad parece no preocupar a las autoridades de salud porque hasta la fecha no se ha visto ningún comunicado. Asimismo, explicó que no se ha realizado una acción de evaluación por parte de las entidades competentes.
Recojo de los residuos
«Están dejando en manos de nosotros y de las municipalidades la responsabilidad de recoger y disponer adecuadamente de los residuos hospitalarios. Solo la Diresa Callao recogió una parte de los residuos encontrados en la Playa Márquez en el Callao. Dejamos un lote de lo encontrado en playa Chica en la comisaría de Santa Rosa, (…)”, señaló Alfaro.
Según Arturo Alfaro, la campaña continuará en Callao, Ancón y Santa Rosa hasta el 16 de febrero. Esta labor se realizará en coordinación con las municipalidades y el auspicio de Repsol.
«Los resultados obtenidos son exitosos en cuanto a limpieza de playas y sensibilización de bañistas. Pero, nos ha mostrado la realidad de la contaminación del mar peruano», finalizó.