CUSCO. El XXV Congreso Internacional de la Red de Fondos Ambientales de Latinoamérica y el Caribe (RedLAC) culmina este jueves 26 de octubre, tras reunir, en la ciudad de Cusco, a líderes ambientales expertos en finanzas climáticas para abordar soluciones y nuevas propuestas destinadas a la conservación y restauración de la biodiversidad, así como el rol de los pueblos indígenas.
El simposio, organizado este año por el Programa de Fondos para la Naturaleza del Perú (Profonape), entidad adscrita al Ministerio del Ambiente (Minam), es considerado como la antesala en América Latina para lo que será la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP 28), que tendrá lugar a fines de noviembre en Dubái, Emiratos Árabes.
Pueblos indígenas: Aliados y no beneficiarios
Uno de los temas centrales de la RedLAC 2023 fue la participación de los pueblos indígenas u originarios en la gestión de las Áreas Naturales Protegidas (ANP) y su rol para hacer frente al cambio climático. Durante su participación, Fermín Chimatani, presidente de la Asociación Nacional de Ejecutores de Contrato de Administración de las Reservas Comunales del Perú (Anecap), señaló que es “urgente comprender a los pueblos indígenas como aliados en lugar de beneficiarios”.
Según manifestó, las necesidades de las comunidades nativas deben abordarse, considerando a los pueblos indígenas como socios igualitarios en el desarrollo de las ANP. En esta perspectiva, subrayó la importancia de fortalecer las organizaciones indígenas, dado que los pueblos originarios desempeñan un papel fundamental en la preservación de la biodiversidad de sus territorios.
«Como pueblos indígenas asumimos los costos. Nosotros sufrimos las consecuencias de la depredación de los bosques y la falta de medidas para protegerlos. Somos los dueños de nuestros territorios y, por esta razón, hemos decidido tomar acción y plantear soluciones, establecer modelos de gestión y participar en la co-gestión de las Reservas Comunales. Sin embargo, es vital mejorar la distribución justa y equitativa de los beneficios generados. Ahora, las comunidades y sus representantes también estamos marcando la agenda», expresó.
Exigen igualdad de condiciones
Además, sostuvo que “la visión paternalista y colonialista hacia los pueblos indígenas debe cambiar”. Para lograrlo, es necesario crear las condiciones habilitantes que permitan que las organizaciones indígenas participen en igualdad de condiciones. Este es un desafío que llevará tiempo, pero que ya ha generado resultados positivos.
«Hemos escuchado discursos sobre el desarrollo de una economía verde, pero si no involucramos a los pueblos indígenas en estos procesos, con una participación plena y efectiva, no podremos avanzar. Con este enfoque, hemos evitado contratos de carbono abusivos y compromisos climáticos inconclusos. Se han producido mejoras en la gobernanza ambiental y en la protección de los derechos de los pueblos indígenas. Lo más importante es haber logrado que el sector público, el privado, la sociedad civil y los pueblos indígenas trabajemos unidos por un país más sostenible, equitativo y justo», concluyó Chimatani.
En otro momento, la líder indígena Tarcila Rivera afirmó que el camino para un futuro sostenible está en “contribuir a que los pueblos indígenas del mundo tengan acceso a derechos plenos, reconocer sus lenguas y el libre manejo de sus territorios”. «Cuando hablamos de defender el bosque o la montaña, se deben tomar en cuenta nuestros saberes ancestrales y debemos ser tomados como parte de la solución a problemas que no hemos creado pero del cual somos los más afectados», añadió.