El Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor), adscrito al Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (Midagri), ha fijado por primera vez en el Perú coeficientes referenciales de rendimiento para el procesamiento de trozas de madera. Según la norma, el rendimiento de la madera aserrada será del 56%, mientras que para las tablillas no perfiladas destinadas a pisos será del 41%.
Esta regulación, que busca mejorar la gestión del sector forestal, no aplica a las especies maderables incluidas en los Apéndices de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES). Los titulares de los centros de transformación primaria (CTP) tendrán hasta mayo de 2025 para adecuarse a estas exigencias.
Transparencia y sostenibilidad en el sector
El nuevo coeficiente referencial es parte del Reglamento para la Gestión Forestal y se implementará mediante el monitoreo regular de los CTP. Los empresarios que aseguren rendimientos superiores al establecido deberán solicitar inspecciones previas a SERFOR, acompañadas de estudios técnicos que sustenten su declaración.
Esta medida responde a la necesidad de rastrear con mayor precisión los productos forestales, desde la extracción hasta la exportación, garantizando su origen legal y fortaleciendo la cadena de custodia de las especies maderables.
Estudios respaldan la medida
La normativa fue diseñada tras un estudio de rendimiento que incluyó evaluaciones de campo en las principales regiones productoras de madera del país: Ucayali, Junín, Madre de Dios y Loreto. Se analizaron 400 trozas, con un volumen superior a un millón de metros cúbicos, para determinar los parámetros más eficientes y viables en la industria nacional.
Además, se aprobó la Guía Metodológica para la Determinación del Coeficiente de Rendimiento de Trozas, que servirá como herramienta para implementar la norma y garantizar su correcta aplicación.

Impulso a la competitividad del sector
El Serfor ha señalado que esta regulación contribuirá a hacer más competitivo al sector forestal peruano, incentivando a los operadores a adoptar prácticas sostenibles y eficientes. Asimismo, el balance de transformación primaria, que será reportado mensualmente a la Autoridad Regional Forestal y de Fauna Silvestre (ARFFS), permitirá un control más efectivo de las operaciones en el país.