Cada 5 de setiembre se conmemora el Día Internacional de la Mujer Indígena. Hoy destacamos cómo las artesanas de diversos pueblos indígenas están fortaleciendo su liderazgo. En diversas regiones del Perú, estas mujeres han encontrado en la artesanía una oportunidad para generar cambios profundos en sus comunidades. La creación de piezas artesanales no solo refleja la identidad cultural de sus pueblos, sino que también les permite asumir roles económicos y sociales clave.
Este es el caso de 130 mujeres de los pueblos indígenas kukama kukamiria, shipibo konibo, yanesha y asháninka, quienes lograron empoderarse a través de su arte. Tal es caso de la ciudad de Oxapampa, donde mujeres yaneshas se unieron para formar un comité de artesanas. Este es un espacio en el que comparten conocimientos, se apoyan mutuamente y fortalecen su autoestima.
Mirian Cirineo Frey, una de las integrantes del comité, cuenta: “Construimos la casa de artesanas con nuestras propias manos y las que sabían tejer y teñir le enseñaron a las que querían aprender. Somos 75 artesanas que hemos perdido el miedo de expresarnos y vendemos nuestros productos con facilidad. Sin darnos cuenta, nos empezamos a sentir orgullosas de lo que logramos y entendimos que somos embajadoras de nuestra cultura”.
Oportunidades para las nuevas generaciones
Emma Tapullima, artesana kukama kukamiria, destaca cómo el trabajo artesanal transforma las vidas de sus familias: “Gracias a la artesanía tenemos hijos profesionales. Algunos de ellos son profesores, enfermeros y guías oficiales de turismo, y siguen en nuestra comunidad. Otros participan en el desarrollo de nuestras artesanías. A lo largo del tiempo vemos los beneficios”.
Este proceso lleva a las mujeres indígenas a ocupar espacios de diálogo y participación en sus comunidades, como lo relata Tapullima: “Poco a poco empezamos a participar en más espacios de diálogo y exposición, logrando comunicar nuestras necesidades, entre ellas la creación de una escuela intercultural bilingüe, la cual hoy es una realidad”.
La artesanía y la conservación del bosque
La relación entre las artesanas indígenas y el ambiente es fundamental. Las comunidades dependen de un entorno natural saludable para obtener los insumos que utilizan en sus artesanías, como las semillas y cortezas de los árboles.
Jaime Chihuanco, cornesha o jefe yanesha, señala: “Aprovechamos las semillas en las artesanías y las cortezas de los árboles para el teñido de los telares sin afectar la regeneración natural y la alimentación de los animales del bosque, asegurando su conservación”. Este enfoque permite que las comunidades mantengan sus bosques en pie, garantizando la sostenibilidad de su arte y su entorno.
Un futuro sostenible para las mujeres artesanas
Desde 2017, organizaciones como WWF, en colaboración con el Banco Mundial y la Fundación Eaglemere, brindan apoyo a emprendimientos liderados por mujeres indígenas artesanas. El soporte técnico y comercial, la mejora de infraestructura y el desarrollo de alianzas comerciales fueron clave para el fortalecimiento de estas iniciativas. Además, la instalación de más de 10 mil plantones ha contribuido a la restauración de los bosques que nutren la actividad artesanal.
Las casas de artesanas se convierten en centros de cultura y apoyo mutuo, donde las mujeres se empoderan y enfrentan los desafíos del presente con la esperanza de un futuro más próspero para sus familias y sus comunidades.