Según datos de la Superintendencia Nacional de Migraciones, más de un millón de ciudadanos extranjeros residen en el Perú. Sin embargo, no todos los niños tienen acceso a la educación.
Aproximadamente 130 mil extranjeros han sido inscritos en colegios, mientras que 140 mil no han logrado hacerlo por problemas económicos, responsabilidades familiares y falta de vacantes.
Fernando Bolaños, representante de Unicef, señaló que algunos niños trabajan en mercados o están en situación de movilidad con sus familias.
La deserción escolar nacional entre los peruanos puede ser del 6%, pero para los menores extranjeros, podría alcanzar el 20%.
Situación del abandono escolar
En el Perú, hay 360 962 estudiantes de entre 4 y 18 años que no tienen acceso a la educación. Dichas cifras planean una crisis en el sistema educativo. Esta misma es agravada por los problemas derivados de la pandemia de COVID-19.
El Ministerio de Educación y el Registro Nacional de Identificación y Estado Civil, han tomado medidas para reducir la tasa de abandono escolar.
La pandemia ha exacerbado los desafíos educativos, con un aumento significativo en la deserción escolar. Esto se produjo particularmente en las zonas rurales, donde las dificultades económicas llevan a muchos jóvenes a abandonar la escuela para trabajar.
Esta situación no solo afecta la competitividad laboral de los jóvenes y la productividad del país, sino que también complica el acceso a niveles educativos superiores debido al alto costo de la educación.
Para abordar este problema, se ha implementado la iniciativa Todos Presentes. Dirigida por la Dirección Regional de Educación de Lima Metropolitana, esta busca identificar y registrar a los menores que no asisten a la escuela para ofrecerles apoyo a través de una línea directa de comunicación confidencial.
La opinión de los escolares
En la institución educativa 3032 Villa Angélica, del distrito de San Martín de Porres, aproximadamente la mitad de los estudiantes son extranjeros. En este colegio también se entona el himno nacional del país vecino.
Según relató a Latina un joven argentino de 17 años, él y sus cinco hermanos han estado en el Perú durante seis años. Aquí ha observado a muchos estudiantes cambiar de escuela para encontrar empleo o porque está más cerca de sus hogares.
Agregó que todos tienen la aspiración de regresar a Argentina algún día. Debido a que allí tienen más oportunidades de acceder a otras universidades.