En la comunidad de San Cristóbal, distrito de Samugari, agricultores del Valle de los Ríos Apurímac, Ene y Mantaro (Vraem) participaron en la instalación de una parcela de café bajo el sistema de terrazas, una técnica agrícola que busca conservar los suelos, prevenir la erosión y mejorar el aprovechamiento del terreno en zonas de fuerte pendiente.
La actividad forma parte del Proyecto Vraem Sostenible, financiado por la Unión Europea en Perú y ejecutado por las organizaciones Agrónomos y Veterinarios Sin Fronteras (AVSF) y PROGRESO. El objetivo es promover un modelo agrícola ambientalmente responsable y adaptado al contexto amazónico-andino.
Mejora del rendimiento y calidad del café
Durante la jornada, se sembraron variedades de café como catigua, seleccionadas por su resistencia a enfermedades y su alto valor en taza. Esta apuesta productiva busca elevar la calidad del café en la zona, lo que podría facilitar el acceso a nuevos mercados y generar mayores ingresos para las familias productoras.
El uso de terrazas, una práctica ancestral adaptada a las condiciones actuales del Vraem, permite enfrentar de manera más eficiente los efectos del cambio climático y fortalecer la sostenibilidad de los sistemas agrícolas.

Con esta instalación en San Cristóbal, ya son tres las parcelas implementadas bajo el sistema de terrazas en distintas localidades del Vraem. Estas experiencias buscan ser replicadas en otras comunidades interesadas en adoptar prácticas más resilientes y sostenibles.
Cada parcela también funciona como espacio de capacitación para agricultores locales, permitiendo que la técnica se difunda y se consolide como alternativa viable en la región.
Enfoque territorial y agroecológico
El Proyecto Vraem Sostenible se ejecuta con un enfoque territorial y agroecológico, promoviendo el desarrollo rural a partir de la innovación y el respeto al ambiente. Según PROGRESO, “Sembrar terrazas es también sembrar futuro”, en referencia a los beneficios a largo plazo de esta intervención.
Las organizaciones ejecutoras destacan que el proyecto no solo tiene impacto productivo, sino que también contribuye a fortalecer las capacidades locales y mejorar la gestión del territorio en una zona estratégica y con alta vulnerabilidad ambiental.