El Festival del Jaguar celebrará este mes su segunda edición en dos ciudades amazónicas: Leticia (Colombia), del 14 al 17 de noviembre, y Puerto Maldonado (Perú), del 25 al 29 del mismo mes. El encuentro tiene como propósito generar conciencia sobre el valor ecológico y cultural del jaguar (Panthera onca), una especie clave en los ecosistemas de la selva tropical.
La iniciativa busca unir arte, ciencia y saberes ancestrales para destacar la importancia de este felino, considerado el más grande de América y el tercero del mundo. Según los organizadores, el festival promueve un diálogo entre comunidades locales, instituciones y colectivos amazónicos comprometidos con la conservación ambiental.
Un felino en riesgo
El jaguar cumple una función esencial en la regulación de las poblaciones de otras especies, lo que contribuye al equilibrio ecológico de los bosques donde habita. Sin embargo, su supervivencia se encuentra amenazada por la pérdida de hábitat, la caza ilegal y la expansión de actividades humanas en la selva.
En los últimos años, los territorios indígenas que albergan poblaciones de jaguares se han reducido en un 50 %, lo que ha incrementado los encuentros con humanos y, en muchos casos, ha derivado en la muerte de estos animales.

De Lima a la Amazonía fronteriza
La primera edición del Festival del Jaguar se llevó a cabo el año pasado en Lima y en la comunidad de Padre Cocha, en Loreto (Perú). El evento reunió a más de 150 personas en la capital peruana y a más de 170 niños y jóvenes de los pueblos indígenas bora y kukama-kukamiria en la Amazonía.
En esta segunda edición, el festival se traslada a zonas fronterizas de la cuenca amazónica. La programación culminará el 29 de noviembre, fecha en que se conmemora el Día Internacional del Jaguar.
Organización y financiamiento
El evento es organizado por Renace, Samay Conservación y Travesía, junto con otras instituciones y colectivos amazónicos. Estas organizaciones trabajan de manera conjunta para promover la protección del jaguar y de los territorios donde habita.
Con el fin de asegurar la realización del festival y fortalecer los esfuerzos de conservación, los organizadores están recaudando donaciones entre quienes deseen apoyar esta iniciativa ambiental y cultural.


